Leo Messi se corona como el rey con su séptimo balón de oro: ¿el más injusto de la historia?

Ayer, lunes 29 de noviembre a las 20:00h de la noche, París acogió uno de los grandes momentos futbolísticos de todo el año: la Gala del Balón de Oro. Una celebración por todo lo alto del deporte de la pelota donde se dan los premios con más rango del fútbol mundial: el mejor delantero, el mejor centrocampista, el mejor defensa, el mejor portero, el trofeo Kopa al mejor jugador joven y, por su puesto, el Balón de Oro, la distinción más importante del mundo.

En la Gala estuvieron grandes protagonistas, pero no sorprendió la gente que estuvo allí, sino todas las ausencias tan importantes que hubo. Por ejemplo, la de Karim Benzema. No tenemos muy claro por qué, pero ayer la Torre Eiffel no alumbró el rosto del 9 del Madrid. ¿Sabía el francés que no iba a llevarse el Balón de Oro y por eso no asistió? ¿O simplemente no quería viajar tantos kilómetros y estar al 100% para la próxima jornada liguera?

Quién tampoco apareció y, según nuestra opinión, queda muy tachado y poco caballeroso, es Cristiano Ronaldo. El astro portugués del Manchester United no apareció por el evento más importante de todo el año como ya nos viene acostumbrando. Si sabe que no va a ganar, CR7 no aparece por allí. ¿Esto significa que le da miedo el fracaso? ¿No quiere que la gente le vea como un perdedor? Desconocemos porque esto ocurrió, pero lo que si sabemos es que el de Madeira sigue quedando mal delante de todo el mundo del fútbol y demuestra que no está preparado para perder.

El primer protagonista de la noche fue Pedri, el centrocampista canario del Fútbol Club Barcelona que, con esa humildad que le caracteriza, salió al estrado para recoger el premio a mejor jugador joven del mundo, el trofeo Kopa. Agradeció a sus padres, a su hermano y a todos sus familiares todo el apoyo que le habían dado durante todo ese tiempo, desde que salió de la isla hasta convertirse en el jugador que es ahora mismo. Sin duda, un premio muy merecido que compartió con todos de la mejor manera posible. Eso sí, acordándose siempre de su isla, de todo lo que está pasando con el Volcán y acordándose de todas aquellas personas que lo están pasando muy mal en estos complicadísimos momentos. Gran detalle de Pedri que dice mucho de él.

El mejor portero, sin lugar a duda, fue Gianluigi Donarumma. El portero italiano del Paris Saint Germain y de la selección italiana fue galardonado como mejor portero del mundo debido a las actuaciones magistrales que ha tenido durante todo el año. Evidentemente la grandísima Eurocopa que realizó con la azzurri y ganar ese campeonato ha influido muchísimo ya que fue el mejor de todo el torneo salvando a su selección en muchos momentos. Premio muy merecido para Gigi Donarumma.

El Balón de Oro Femenino fue para una jugadora totalmente estelar. Una jugadora que está reventando todos los récords con tan solo 27 años y que tiene una zurda que muchos y muchas querrían. Estamos hablando de nada más y nada menos que de Alexia Putellas, la jugadora del Fútbol Club Barcelona. Y es que no hay nadie ahora mismo en el fútbol femenino que se merezca este premio más que ella. Fue nombrada como mejor jugadora del año por la UEFA, ganó la Copa de la Reina y fue MVP de la misma, ganó la Champions League con el Fútbol Club Barcelona y la Liga Española. Es decir, consiguió un hito histórico, ganar el triplete.

Además, tuvo uno de los momentos más mágicos de la gala. Ese vídeo que le dedicó su familia y que hizo llorar a la propia jugadora y sus palabras, cuando recibió el premio, dedicadas a su padre, ese que le mira orgulloso desde el cielo y que Alexia le dijo al oído: Esto va por ti, papá. Inigualable Alexia Putellas.

Y es ahora cuando viene el lío. El lío con Leo. Buen juego de palabras. Y es que, para Betsson, el jugador que mejor ha jugado este año, el más determinante, y el que ha marcado más goles es Robert Lewandowski. Entendemos que ganar la Copa América con tu país supone un plus que quizá no valoramos, pero la realidad es que el año de Messi ha sido muy sin más y el año del polaco ha sido estratosférico. Quizá sea uno de los años más reñidos e injustos de toda la historia del Balón de Oro. Además, es todavía aún más injusto cuando vez que, Robert Lewandowski era el favorito para ganar el Balón de Oro el año pasado y no pudo celebrarse la gala por temas que todos conocemos de sobra.

El fútbol le debe un balón de oro al grandísimo Robert Lewandowski.